100 años de soledad. Gabriel García Márquez (GGM)
Pocos libros tocan tanto como la ópera prima de Gabriel García Márquez. En Macondo, el pueblo creado por el genio, la vida converge y se retuerce, da placer y dolor, tristeza y alegría haciendo que el lector se involucre dentro del universo como si le fuese propio.
Algunos elementos nos recuerdan al romanticismo. No son pocas las mujeres que se dejan llevar por la pasión y el deseo (Amaranta, Rebeca, Amaranta Úrsula, etc) y nos recuerda en ciertos aspectos a mujeres como Madame Bovary. Por otro lado, los hombres marcados por la maldición del destino aciago que los persigue hasta la muerte, nos llevan a pensar en personajes como Álvaro en Don Álvaro o la fuerza del sino o al famoso Don Juan Tenorio de Zorrilla.
Sin embargo, estos personajes convergen entre la miseria y la felicidad, entre la novedad y la monotonía, dando pequeños sesgos de esperaza que abogan al lector a un sufrimiento aletargado.
La magia es tan presente que muchas veces traspasan las mismas páginas para invadir nuestro propio mundo ( aviso de Spoiler ) : Él continuo sonar de los huesos de los padres de Remedios, el intenso olor a pólvora del cadáver de José Arcadio, Melquíades y los papiros que cuentan la historia de los Buendía y por ende la de Macondo, etc.
A pesar de todo la realidad también se presenta para poner su losa sobre la ilusión primera de la felicidad; en una crítica contra la sociedad GGM construye un paraíso que se irá derribando poco a poco. En primer lugar con la llegada del gobierno, Macondo se convierte en un lugar al que empiezan a llegar las imposiciones, la ideología y con ello el descontento y la guerra que define el carácter del icónico coronel Aureliano Buendía. En segundo lugar la llegada de Dios que transforma las creencias, la educación y las costumbres haciendolas regirse por la moral. Y por último, la llegada de la compañía bananera que supone la llegada del ferrocarril, la electricidad (el capitalismo al fin y al cabo) y el final de la libertad y la utopía.
GGM construye a partir del amor y la tragedia, de la magia y de la crítica un mundo que es tan cercano y tan lejano al mismo tiempo que nos define y nos deja libertad para cambiarlo a pesar de su clara visión pesimista de la historia de la humanidad.
"Porque las estirpes condenadas a 100 años de soledad
no tienen una segunda oportunidad sobre la tierra"
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